viernes, 4 de febrero de 2011

$ 586 billones de pesos costará Plan de Desarrollo que ordenará el país


Según el Gobierno los recursos se destinarán a la edificación de tres pueblos, incluido Gramalote (N.S), la construcción de un millón de viviendas de interés social, la devolución de 2 millones de hectáreas para los afectados de la violencia, el ordenamiento territorial y el desarrollo equitativo de todas las regiones.

El Plan Nacional de Desarrollo, que inicia revisión en el Senado de la República, sería financiado en un 60 por ciento, con recursos de la nación -sectores de hidrocarburos y minería, el impuesto del 4 mil y la venta de otro 10 por ciento de Ecopetrol-. El 40 por ciento restante provendria del sector privado.
Hernando José Gómez, Director de Planeación Nacional, aseguró a Sincensura que el Plan de Desarrollo contempla la financiación con recursos propios de la Nación buscando que el país no quede endeudado con préstamos internacionales.
La senadora Piedad Zuccardi, integrante de las comisiones económicas que analizan el Plan de Desarrollo aseguró que “se está estudiando la viabilidad del Plan de inversiones del cuatrenio “y para ello hemos venido aprobando presupuestos anuales de las diferentes vigencias, del orden de los $180 billones de pesos anuales, que tendrán como destino prioritario los afectados por la ola invernal”.

Jorge Iván González, profesor de la Facultad de Economía, (Universidad Nacional) destaca del Plan de Desarrollo la insistencia en el ordenamiento territorial y la equidad que propone para el crecimiento de todas las zonas colombianas. “En Colombia la región central: Bogotá y los santanderes crecen a mayor ritmo que las zonas pacíficas y del sur del país, y dentro de cada región también hay mucha desigualdad entre la capital y los municipios”.

El profesor González asegura que “al Presidente también hay que apoyarlo en el tema de restitución de tierras y de reforma agraria”.
Sin embargo destaca que al Plan de Desarrollo le falta articulación entre las 5 grandes estrategias o locomotoras en las que el gobierno basará su estrategia de navegación.
“No es claro cómo se van a integrar la locomotora de la minería, que está descarrillada, con la del agro, la de vivienda y la de ciencia y tecnología”, dijo.
Añadió que “el Plan de Desarrollo del Presidente Santos no es claro en aspectos fundamentales como la importación de alimentos; actualmente el país importa mas de 8 millones de toneladas de alimentos que pueden producirse en nuestras regiones”.
Para González el Congreso de la República enfrenta el gran desafío de articular este ambicioso Plan de Desarrollo que a su juicio es un compendio de buenas ideas pero desarticuladas.